Todos los días mientras paseo me fijo y picoteo moras de los zarzales de los caminos... como vulgar estornino.
Recordaba las mermeladas que se hacían en mi casa y en casa de mis abuelas, Gloria y Paula.
Ayer me decidí, y como un caperucito "rojo"?.. agarré una cestita y apañé medio kilo de moras silvestres. Solamente medio kilo porque me arté de arañazos.
Ayer me decidí, y como un caperucito "rojo"?.. agarré una cestita y apañé medio kilo de moras silvestres. Solamente medio kilo porque me arté de arañazos.
INGREDIENTES:
1/2 kilo de moras
250 grs de azúcar
Zumo de 1 limón
PREPARACIÓN:
Limpiamos y lavamos las moras que hemos recogido por la
mañana tempranito para que estén frescas.
Las ponemos en una cazuela con el azúcar y el zumo del
limón, dejándolas reposar unas horas. Yo las tuve todo el día.
Macerándose |
Ponemos la cazuela a fuego medio y dejamos hervir una hora
aproximadamente, removiendo de vez en cuando.
Pasado este tiempo deben estar ya en su punto. A mí me
quedaban aún algo enteras y duras, y las tuve más tiempo añadiéndole un poco de
agua y más azúcar.
Con la minipimer las batí un poco para afinar la textura y
enseguida a un frasco de cristal previamente hervido.
Todo lo que se hace en casa tiene un gusto y sentido
distinto, así que la reservaré para una merienda o desayuno especial… en un
jardín, bajo una morera… o bajo toldo de caravana en primera línea de playa…
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